
Pues así, sorprendidos, debieron sentirse l@s alumn@s de segundo curso cuando recibieron la visita de un poeta muy cercano y sin embargo desconocido: Manolo Recio, la persona a la que se dirigen cada día para que les haga fotocopias, les dé un paquete de tizas o les marque el número de sus padres cuando están enfermos.
Manolo los deleitó con un recital de algunos de sus poemas y respondió a las dudas que le plantearon sobre el mundo de la creación poética, sus gustos, cómo se inspira...
Fue una actividad muy gratificante para los alumnos y les hizo comprender que las personas que menos te esperas pueden esconder una sorpresa.
¡GRACIAS MANOLO, ESPERAMOS ESCUCHAR MÁS POEMAS TUYOS OTRO DÍA!